Sé lo que estáis pensando: "Chemi, esto es un libro de poesía, ¿qué haces comentando estas cosas?". Pues veréis: me gusta la poesía. Mucho. Y aunque no tengo todo el tiempo que me gustaría para leer, sí que me apetece, de vez en cuando, sumergirme entre versos, y debo decir que el libro que nos ocupa, 'No comparto las razones de la luz', bien merece que veáis mi faceta más poética.
Aunque tras éste llegaron otros, 'No comparto las razones de la luz' es el primer poemario de Pedro Alberto Cruz, más conocido por su escritos sobre arte y cultura. Se trata de un libro de escritura compleja pero pausada que bebe más de clásicos contemporáneos y modernos que de la historia de la poesía. A mi, personalmente, la estructura de sus textos me recuerda a la de que usara Bukowski hace años, aunque con expresiones más descafeinadas encerradas en un lenguaje más complejo y metódico, influenciado por la poesía y literatura portuguesa (en concreto, Fernando Pessoa y su 'Libro del Desasosiego').
'No comparto las razones de la luz' es un libro donde, si sois de los que subrayáis, acabaréis con todas las páginas marcadas. Cada verso encierra un mundo de ideas para trasladar al lector a una realidad que, probablemente, le sea cotidiana o, como mínimo, muy conocida: la de la decepción.
Lo dijo el propio autor, con respecto al título del libro, en una de las presentaciones que realizó en 2012: «Hay días en los que te encuentras mal, sales a la calle, miras, el cielo es luminoso y el sol te hiere. Otros días es al revés. La luz siempre viene a destiempo». Así, todo parece fuera del alcance del autor, aunque los poemas estén a flor de piel.
Entre las 70 composiciones que estructuran el poemario se encuentran auténticas joyas, piezas lúcidas y equilibradas, cargadas de matices, en las que no hay teatralidad, no hay espectáculo: el desencanto se muestra tal cual, como si cada verso fuera un lastre que su autor deba cargar consigo. Cada verso duele en la medida en que muestra una realidad en la que no se termina de encajar y que explica, palabra tras palabra, que allí donde existe lo humano reina la decepción.
Un libro que merece un lugar preponderante en las estanterías de todo amante de la lírica.
Pues nada, me lo tendrás que pasar. Aunque yo no sea muy amante de la poesía, si es buena da gusto sumergirse en ella, a pesar de que, como digo, me cueste mas en el caso de la lírica. Y a ver cuando te animas y publicas algo tuyo, que también escribes muy buena poesía. Sabes que yo lo compraría.
ResponderEliminarJaja, gracias! Tendré que ir pensando en recopilar cosas, graparlas y venderlas :D
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