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jueves, 28 de noviembre de 2013

Cómo escribir críticas de cómics


Antes de seguir leyendo esta entrada debes saber que no hay una manera única de escribir una opinión o una crítica, por lo que todo lo que planteo no son más que consejos que pueden resultar útiles a todos aquellos que se quieran adentrar en el mundo de la crítica comiquera. Por supuesto, sé que muchos de vosotros, bloggers experimentados, pensaréis que no tengo ninguna lección que daros, y probablemente tendréis razón: como digo, esta entrada no es para expertos en la crítica, sino para aquellos que han pasado su vida leyendo tebeos y que quieran adentrarse en este mundo, ya que hay muy pocas guías en la red para los que quieran iniciarse, y casi todas son vagos consejos (vaya... probablemente esta también...) que no ahondan en materia. 


Lo más importante a la hora de comentar un tebeo es, por supuesto, leerlo. Una lectura comprensiva general, y otra muy detallada, fijándose en el curso de la narración, en la composición de las páginas, y parándose a pensar en el ritmo de la lectura que hemos hecho. Además, viene bien tener a mano algo donde anotar las posibles ideas que surjan de una lectura inicial ya que, en muchas ocasiones, esas ideas volátiles del momento serán las que den la clave que marcará el tono de nuestra opinión. 

A partir de aquí, estructuraremos nuestra crítica a través de varios puntos (que podéis utilizar o no, dependiendo del tipo de crítica que hagáis; por ejemplo, si queréis hacer una crítica dirigida a gente que o bien ya ha leído un tebeo o lo va a leer, no sería necesario incluir un resumen): Resumen, Guión, Dibujo y Edición.

RESUMEN

El resumen no es un apartado en el que se opine, sino un apartado completamente objetivo donde se dice, en pocas palabras, qué ocurre en el tebeo, sin entrar en detalles importantes de la trama. 

GUIÓN

El guión es una de las partes centrales de un cómic, y podemos sub-dividirlo en dos categorías: Argumento y guión. A la hora de hacer una crítica, lo ideal sería comentar cada una de estas cosas por separado, ya que una historia puede tener un argumento muy interesante pero contar con un guión muy pobre, y viceversa. 

A la hora de comentar este apartado, es más sencillo si nos hacemos a nosotros mismos una serie de preguntas: 

¿Es una obra original? ¿A qué se parece? ¿Lo que cuenta se ha contado otras veces en el mundo del cómic? ¿Cómo interactúa con el contexto de la época? ¿Pretende hacerse eco de la moda? ¿Es un tebeo 'hecho para vender' o cuenta una historia realmente interesante del personaje? ¿Hace avanzar la continuidad del universo al que pertenece, lo retrotrae o ninguna de las dos cosas? ¿Los personajes son veraces? ¿Sus diálogos se ajustan a lo que dirían, según la continuidad? ¿Se peca en exceso o defecto de diálogos y/o cuadros de texto? ¿El guión desarrolla el argumento de una manera dinámica? ¿Cuáles son sus referentes?

Por supuesto, valorar el trabajo de un guionista es más extenso, y son muchas más las preguntas que podríamos hacemos para llegar a una crítica definida (y, aún así, siempre dejaremos algo en el tintero). Y no, no vale con decir "eso ya lo hizo Alan Moore". 

DIBUJO

En el caso del dibujo, también podemos encontrar dos categorías más o menos definidas: Ilustración y Narración. La ilustración es el punto donde se comenta lo bueno o malo que nos resulte el dibujo desde un punto de vista objetivo basado en su grado de iconicidad y realismo (o desde el punto de vista que nos apetezca, aunque es cierto que, por ejemplo, cuando vemos un dibujo de Alex Ross solemos valorarlo muy positivamente por su realismo, y no valoramos tanto uno de, por ejemplo, Peter Bagge... aunque sí, nos guste, y nos encanten sus cómics). 

En este punto también tendremos que valorar el entintado y el color, si lo hubiera, en la medida en que define el dibujo, su contexto y su ambiente, aportando o quitando valor al cómic. 

En cuanto a la narración del cómic (desde el punto de vista del dibujo), nos referiremos a ella como la característica de propia de un tebeo por la que el dibujo marca el ritmo de la lectura a través de, entre otros, la composición de la página o el dinamismo de las figuras que se encuentran en ella. 

En este punto también podemos hacernos algunas preguntas para encauzar nuestra crítica que, como sucedía con las preguntas anteriores, nunca serán suficientes: 

¿Es -lo más objetivamente posible- un buen dibujo? ¿Tiene un estilo propio o pertenece a alguna 'escuela'? ¿cómo sería el dibujo si lo descontextualizáramos? ¿El diseño de los personajes concuerda con la continuidad? ¿Mejora o empeora en ese sentido? ¿Los personajes parecen estáticos cuando deberían ser dinámicos, o viceversa? ¿La historia fluye por la página o es errática? ¿Se indaga en la composición de la página y las viñetas? ¿Las expresiones faciales y corporales son realistas y veraces? ¿Qué aporta la tinta al dibujo? ¿El color se adapta al cómic? 

EDICIÓN

Un cómic no es solo un montón de dibujos y relatos, sino un objeto físico que llega a nuestras manos en forma de producto comercial, y este producto tiene sus logros y defectos como cualquier otro. En este apartado analizamos la calidad de la edición (desde la traducción, la maquetación y la rotulación hasta el valor de calidad/precio) y si ésta influye de manera negativa o positiva en la experiencia de lectura del tebeo.


Y eso es, en mi opinión, lo básico que se necesita a la hora comentar un tebeo. Por supuesto, me dejo en el tintero cosas específicas de cada cómic, como el hecho de que pertenezca a una saga, que se trate de una re-edición, que contenga extras... podéis ver algunos ejemplos en El Bajo de los Comics, el blog que he comenzado hace poco con Laure. 

¿Se os ocurre algo más que añadir?

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