Otro de los libros que ha pasado entre mis manos este verano ha sido Solaris, de Stanislav Lem, una obra fácilmente clasificable pero muy difícil de comentar, ya que no se trata de una obra de ciencia ficción al uso, sino que explora una de las posibilidades más factibles en la búsqueda de vida inteligente fuera de nuestro planeta: ¿y si nos es imposible entender a nuestro interlocutor ni comprender -si los hubiera- sus procesos de comunicación?
Lem presenta así un espacio claustrofóbico alejado de la ciencia ficción más futurista y centrado mas en la psique humana y alienígena que en el propio contexto espacio-temporal. De hecho, la narración solo es especialmente futurista cuando el protagonista lee acerca del planeta Solaris desde un punto de vista científico.
Son estos textos, precisamente, los que relentizan una narración ya de por sí lenta. Sin embargo, es también a partir de estos textos que Solaris (tanto la obra como el planeta) ganan profundidad y complejidad.
Lem propone así, a través de Solaris, que la subjetividad inherente a todo proceso científico humano será la causa de la falta de entendimiento con sistemas de pensamiento ajenos, es decir: la imposibilidad de comunicación con lo que no entendemos y con lo que no es capaz de entendernos.
El libro deja muchas dudas en el aire y muchos pequeños misterios sin resolver y, quizás, esa sea una de las claves del texto, que consigue así hacer partícipe al lector de esa incomprensión de la que hablaba más arriba.
Sin duda, un libro muy aconsejable para todos los amantes de la ciencia ficción. ¿Alguno de vosotros lo ha leído? ¿Habéis visto alguna de las dos adaptaciones a la gran pantalla que hay?
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